Nuestra experiencia como cristaleros del automóvil nos hizo percatarnos de los problemas que alumbraban los elevalunas tanto eléctricos y manuales.

Dada la necesidad imperiosa de nuestros clientes en solucionar este problema, nos pusimos a investigar, contrastando que la solución que el resto de empresas proponían era la sustitución del elevalunas completo, siendo éste un precio enorme y excesivo para los clientes. Por ello nos pusimos manos a la obra para encontrar la forma de repararlos sin necesidad de sustituirlos.
 

Después de años investigando, trabajando y perfeccionando nuestra técnica, hemos conseguido ser capaces de reparar cualquier tipo de elevalunas independientemente de la marca, modelo o año.

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Nuestras reparaciones son de una extraordinaria calidad gracias a nuestras piezas y a la formación que nuestros operarios han obtenido, realizando la reparación a un precio sin competencia, en el mismo día y con una garantía de 6 meses.